Ya somos dos (poema)


Confieso que yo también amé con locura,
con devoción y soltura.
Confieso que muchas veces
se agitó mi corazón cuando le vi acercarse.
Confieso que en sus brazos de fuego,
me derretí como el hielo.
Confieso que sus besos
estimulaban mil mariposas de emoción.
Confieso que me encariñe más allá del limite,
de su sonrisa traviesa, de sus manos suaves,
de su mirada profunda y perversa.
Confieso que dolió su partida,
y aunque cueste el universo, intento olvidarle.
Ya sabes, no eres el único,
resulta que ambos deseamos lo mismo.
Cicatrizar heridas, clausurar portales,
recuperar ese pedazo de ser restante,
para ser completos y al fin,
comencemos a escribir nuestra historia.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un trozo de tiempo (poema)

Muchacha

Querida mía